lunes, 24 de noviembre de 2008

Para variar, se cebó

Mi flamante cita del domingo en la tarde se cebó. En realidad no era una cita bien, sólo iba a conocer a este chico acompañándolo a comprar unas cosas. Pero a media tarde me mandó un mensaje diciendo que le dolía la cabeza y no quería salir... ¡Qué excusa más trillada! En fin, ya es la segunda vez que me cancela, y nomás no lo he podido conocer. La otra ocasión salió con una excusa similar. Y lo peor es que no es la primera vez que me pasa, obviamente. La semana pasada yo tenía muchas ganas de salir, a cualquier parte, sólo que estuviera bien acompañado. Así que le mandé un mensaje a Ariel, un chico con el que había salido 3 veces antes, pero por asuntos escolares no habiamos podido salir de nuevo. Pero se tardó en contestar el mensaje... y en ese transcurso de tiempo me manda un mensaje Emmanuel, un chico con el que salí hace como 2 meses, y que honestamente, ni ganas tenía de volverlo a ver. En fin, me invitó a una disco gay, y como quería salir le dije que sí. Pero entonces, Ariel contestó y preguntó que a dónde quería que fuéramos. A ese sí lo quería ver, me gusta mucho y me la paso muy bien con él. Así que de inmediato le cancelé a Emmanuel, el cual se molestó mucho, me dijo que por qué le cancelaba, que no había hecho planes con nadie más, que no lo podía dejar plantado. Y bueno, no lo dejé plantado, le avisé que no iba a poder ir, tampoco era para que se molestase tanto. De todas maneras me mandó literalmente a la mierda. Perfecto, lo último que faltaba para no querer volver a saber de él nunca más. En fin, seguí arreglando mi salida con Ariel, pero para colmo, mi celular estaba peor que nunca, no me dejaba escribir ni tres palabras antes de apagarse... y el internet, ni se diga, la conexión terrible. Así que como pude excribí el mensaje más breve indicando dónde nos veríamos y a qué hora. Y a la media hora, me contesta diciendo que le dio pereza salir, que no tenía mucho dinero y que mejor no iba a salir. Y yo, ¡quedé como el perro de las dos tortas! De verdad tenía ganas de verlo, no me importaba si íbamos a la disco esa o no. Creo que me llevaré una mala imagen de los chicos de esta ciudad. ¡Nomás se rajan! y por pura flojera... Con esto pocas ganas me quedan de siquiera intentar salir con un chico de aquí otra vez... Pero bueno, ya casi me voy, y por ahora me concentraré en planear mi viaje.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Se acabó

Se acabó el semestre. Un semestre de cuatro meses en realidad. Fue una experiencia que nunca voy a olvidar... Vivir en una nueva ciudad, conocer gente nueva, hacer las cosas totalmente de otra manera a la que estaba acostumbrado. Fue un poco difícil adaptarme a todo esto, pero terminé por acostumbrarme. Y sobre todo difícil fue trabajar en equipo con gente que no conocía y que no llegué a tenerles la confianza suficiente para contarles todo de mí. Como comentaba antes, con uno de mis equipos estaba incómodo cuando hablaban de chicas y lo buenas que estaban, pero sobre todo con sus comentarios homofóbicos, incluso llegando a comentar que les daban asco los gays. Y yo como estúpido sin decir nada. No me atrevía. Sentía que si decía algo todo iba a cambiar. Y a fin de cuentas terminamos el trabajo muy bien, todo quedó muy lindo, y, me parece, se quedaron con una buena impresión mía. No sé si pensaron que soy gay, porque cuando pasaba una chava buenísima yo estaba distraído mirando cualquier cosa, a lo que sólo comentaban: este anda allá en la estratósfera...
En fin, tal vez el mañana que los vea cuando nos den la calificación les diga... pero lo más probable es que no... digo, ¿para qué? Tal vez nunca los vuelva a ver en la vida. En 3 semanas me voy de esta ciudad a viajar por los alrededores, para después volver a mi ciudad natal. Así que, según como se den las cosas, a ver qué pasa. Por lo pronto hoy saldré con un chico, iremos a un mercadillo de artesanías, y después quién sabe, jeje. Ojalá todo salga bien, o ¡mejor que bien!

viernes, 14 de noviembre de 2008

Estrenando...

Heme aquí, un viernes a las 2:43 a.m. escribiendo la primera entrada de mi blog. Mañana me tengo que levantar temprano para ir con mis compañeros de equipo a continuar con el trabajo al que tanto le hemos dado vueltas durante este año, bueno, en mi caso, durante este semestre... A estos chicos los conocí apenas en agosto, por lo que no puedo decir que son mis amigos... y no se si lo serán algún día. Ellos son heterosexuales, y además, machistas y mujeriegos, por lo que me cuesta un poco convivir con ellos, siendo tal como soy. Ni siquiera tenemos gustos similares, como para pasar un rato agradable mientras trabajamos. Me dan ganas de decirles un día: Soy gay, y ¡ya dejen de preguntarme sobre chicas y ligues! En fin, mañana me concentraré en hacer lo que me corresponde del trabajo, y trataré de pasar el día lo mejor posible, porque si no es así me voy a estresar...